Las condiciones eran perfectas para probar el J Craft Torpedo, de 42 pies de eslora (12,8 metros), en las aguas de Mónaco. El sol brillaba. Superyates valorados en miles de millones de dólares se habían reunido en el Principado con motivo del Salón Náutico de Mónaco. El propietario de J Craft, Radenko Milakovic (que se apresuró a desviar toda la atención de sí mismo hacia los expertos artesanos responsables de la construcción de estos magníficos runabouts en la pequeña isla sueca de Gotland), se había ofrecido amablemente a llevarme a dar una vuelta.
Y como para la ocasión llevaba puesta mi americana de terciopelo azul, me sentí un poco como James Bond. Pero hasta que no aceleré a fondo y empecé a trazar curvas en uno de los fondeaderos de superyates más famosos del mundo, no me di cuenta de que este lujoso runabout construido a mano es mucho más que otro bonito barco.
De hecho, puedo decir por experiencia propia que es difícil encontrar otro diseño que combine la elegancia, la artesanía, el confort, la potencia, el control, la navegabilidad y el factor X casi místico de J Craft Yachts.
Y puesto que está propulsado por dos Volvo Penta IPS (hélices montadas en la proa que hacen que las maniobras sean fáciles, seguras y cómodas), no me sorprendió que el Torpedo fuera tan sensible y tranquilizador durante mi prueba. También era obvio que el Torpedo había sido diseñado para afrontar una amplia gama de condiciones en alta mar. El casco está diseñado para proporcionar estabilidad y rendimiento, además de un aspecto atractivo, por supuesto. Y cada J Craft cuenta con un control de joystick de diseño y tecnología de vanguardia que hace posible el atraque y las maniobras en espacios reducidos.
Y, por supuesto, como el Torpedo también ha sido diseñado para ser excepcionalmente rápido, está disponible con opciones de motorización que van de los 800 a los 1.300 caballos de potencia total; es posible alcanzar velocidades de hasta 47 nudos.
Además de ser rápido, el casco también se ha diseñado para ser excepcionalmente estable, por lo que está equipado con un sistema de estabilización giroscópica Seakeeper que permite ser rápido y cómodo también con mal tiempo. De hecho, Radenko me dijo que los Torpedo han completado largas travesías con todo tipo de condiciones meteorológicas por el Mar de China Meridional, el Báltico y el Mediterráneo.
Como uno de los afortunados que ha podido probar cientos de barcos nuevos en los últimos 20 años aproximadamente, nunca he experimentado nada tan satisfactorio o estimulante como las sensaciones de velocidad y estilo que sentí al timón del J Craft Torpedo.
Realmente pertenece a una película de Bond. O, mejor aún, puede formar parte del muelle de su casa.