Si hace varios meses contábamos que Rusia había construido el submarino Belgorod, hoy confirmamos que Putin ya ultima la munición que llevará el sumergible capaz de provocar tsunamis. Se trata de los drones nucleares Poseidón, cuyo primer juego de munición ya se ha fabricado y que Belgorod recibirá «en un futuro próximo», según confirma la agencia rusa TASS, una vez se han completado con éxito pruebas separadas de las unidades principales del Poseidón, incluida la nuclear.
Se trata de drones con capacidad para llevar una ojiva nuclear, alcanzar grandes velocidades y navegar en aguas muy profundas. Se estima que su poder pueda alcanzar los 100 megatones, el doble de la mayor bomba nuclear de la historia. Según Putin, «son silenciosos, tienen una gran maniobrabilidad y son prácticamente indestructibles».
La OTAN, por su parte, se muestra preocupada por la amenaza que supone este nuevo paso de Rusia y las consecuencias que podría tener ponerlo en práctica, ya que su capacidad nuclear podría contaminar con radioactividad grandes masas de agua.
Belgorod, el submarino «del apocalípsis»
Estos drones servirían de munición para el Belgorod, el submarino ruso que cuenta con 6 torpedos 2м39 y tiene un tamaño de 184 metros de eslora y 18,2 metros de manga, con un desplazamiento en inmersión de 24.000 toneladas.
Además, puede sumergirse a más de 500 metros de profundidad y alcanzar los 30 nudos de velocidad. Sus enormes torpedos Poseidón serían capaces de destruir puertos y ciudades costeras, causando incluso tsunamis. Puede recorrer 10.000 kilómetros a unos 70 nudos.